St. Herman’s Blue Hole fascina a visitantes
El Parque Nacional St. Herman’s Blue Hole, ubicado en la milla 42 de la Carretera Hummingbird en el Distrito de Cayo, se ha consolidado como uno de los destinos más completos de naturaleza, historia y recreación en Belize. Bajo el manejo de la Sociedad Audubon de Belize desde 1986, el sitio ofrece natación, caminatas naturalísticas y exploración cultural, atrayendo a más de quince mil visitantes al año.
El parque, que alguna vez fue terreno privado, ahora protege más de 500 acres de biodiversidad y es hogar de más de 200 especies de aves. Con tarifas accesibles de dos dólares para beliceños y ocho dólares para turistas, se ha convertido en un punto clave para la recreación, la educación y la investigación científica.
El principal atractivo es el Blue Hole terrestre, un sumidero de agua dulce formado tras el colapso del techo de una cueva. “Con el flujo constante de agua, el techo eventualmente se debilitó y colapsó. Por eso tenemos el Blue Hole”, explicó Steven Coc, subgerente del sitio. Aunque algunos visitantes han especulado sobre una posible conexión con el Gran Agujero Azul del Caribe, la Sociedad Audubon aclara que ambos ecosistemas son distintos: uno de agua dulce y otro de agua salada, separados por una considerable distancia.
El parque también alberga el segundo sistema de cuevas más grande del país, de casi media milla, con vestigios de la civilización Maya. Entre los hallazgos destacan cerámicas, fragmentos óseos y un cráneo humano completo dentro de la Cueva de Cristal, lo que confirma el uso ritual y religioso que los antiguos mayas dieron a estos espacios.
Además de su riqueza histórica, el parque recomienda a los visitantes respetar las normas ambientales, como no alimentar a la fauna y comer solo en áreas designadas. Ya sea practicando “tubing” en sus cuevas, explorando senderos, observando aves o nadando en el Blue Hole, esta joya natural invita a vivir una experiencia inmersiva en el corazón de Belize.
Facebook Comments