La polémica por un valioso terreno costero en la ciudad de Belize, conocido como Belizean Beach, ha escalado a un conflicto político directo, luego de que el Primer Ministro John Briceño y el representante de Caribbean Shores Kareem Musa acusaran al exministro del UDP Anthony “Boots” Martínez de manejar el terreno con fines cuestionables.
Originalmente asignado a una ONG bajo el programa “Viviendas para los Pobres”, el terreno ahora aparece en el mercado por 11 millones de dólares, desatando indignación pública.
Briceño criticó duramente la transacción, señalando falta de transparencia por parte del gobierno anterior:
“Preguntamos repetidamente por este proyecto de ‘vivienda para los pobres’, pero nadie nos dio respuestas claras… Es nuestro deber pedirle al Sr. Pollard o al Sr. Martínez que devuelvan la propiedad para convertirla en un parque público.”
Además, cuestionó el liderazgo de miembros de la oposición que no han condenado el caso, insinuando falta de valentía para enfrentar la corrupción interna.
Por su parte, Musa apuntó directamente al UDP, calificando la situación como una “vergüenza” y exigiendo que se devuelva la tierra al Estado:
“El UDP es profundamente corrupto, esto es solo otro negocio cuestionable de Boots… vamos a reclamar Belizean Beach al precio que él pagó, ni un centavo más.”
Musa también arremetió contra la falta de obras durante el mandato del UDP en Caribbean Shores, contrastando con nuevos proyectos de vivienda en curso bajo su administración.